¿Qué es una malformación linfática?
La malformación linfática es un defecto en la estructura de los vasos linfáticos. En condiciones normales, los vasos linfáticos drenan los fluidos de los tejidos (linfa) de regreso al corazón. En caso de malformaciones linfáticas, estos vasos linfáticos contienen cavidades más pequeñas o mayores que dejan de estar conectadas al sistema linfático normal. Estas malformaciones pueden coincidir con cambios óseos.
Síntomas y dolencias de las malformaciones linfáticas
Las malformaciones linfáticas pueden ser visibles en la piel en forma de pequeñas ampollas o burbujas de tan solo unos milímetros de anchura. A veces contienen fluidos claros o sanguinolentos. Estas ampollas pueden abrirse, provocando fugas temporales. A veces, se pueden desarrollar ampollas adicionales. Esta fuga supone un problema molesto. Las malformaciones linfáticas llevan consigo un mayor riesgo de infección.
Tratamiento de las malformaciones linfáticas
En el pasado, a menudo el tratamiento consistía en la extracción mediante corte de la lesión (escisión). Sin embargo, las anomalías volvían con frecuencia. Actualmente, el tratamiento del trastorno con inyecciones puede aliviar las dolencias. La prescripción de medias de compresión o trajes presurizados también puede ser un método fructífero. Para determinar cuál es la mejor terapia, se necesita un examen exhaustivo.